viernes, 29 de marzo de 2013

Lavado ótico


Los lavados óticos se realizarán en la consulta de Enfermería que le corresponda



Cuando a usted le han indicado un lavado de oído, es porque su médico, tras la exploración pertinente he detectado la formación de un tapón de cerumen en el conducto auditivo externo, este tapón generalmente está formado por el cerumen, restos de pelos y restos de material procedente de la descamación epitelial.

El cerumen cumple una función protectora creando una fina película que cubre la piel del oído externo, y solo se debe retirar si produce sordera o en aquellos casos en que siendo necesario la exploración del tímpano, el tapón de cerumen dificulta el procedimiento.
El procedimiento de la extracción se realizará por personal cualificado y como regla general se realiza de la siguiente forma:
Antes de la extracción del tapón de cerumen su médico le habrá podido indicar algún tipo de tratamiento para ablandar el tapón y facilitar con ello la extracción del mismo, a este tratamiento se le denomina cerumenolítico. Varios tipos de cerumenolítico están comercializados y de venta en farmacias. Por otra parte el tratamiento casero más común para retirar el cerumen mediante este método es el aceite de oliva.
La enfermera comprobará el tapón de cerumen mediante un otoscópio y posteriormente si no ha detectado signos de inflamación en el oído medio procederá al lavado del mismo irrigando el oído con agua templada, entre 36º – 37ºC (a la misma se le puede aplicar algún tipo de antiséptico). Esta operación se repetirá por varias veces hasta conseguir extraer el tapón.


contraindicaciones para la extracción de tapones de cerumen
Historia previa de complicaciones en anteriores intentos de extracción.
Sospecha de perforación timpánica
Otitis media o externa activa.
Paciente con historial de otitis media crónica o de supuraciones en el conducto auditivo externo.
Cirugía otológica previa, salvo estapedectomía.
Existencia de drenajes transtimpánicos implantados en población infantil.

Los riesgos del lavado de oído:
Antes de proceder a la extracción del tapón usted deberá conocer los riesgos que esta técnica implica y otorgar su consentimiento al mismo.
Usted podrá sufrir de cierta sensación de vértigo una vez extraído el tapón de cerumen. Esto es una sensación pasajera y desaparece en pocos minutos y es debido a la diferencia de presión que usted tenía dentro del oído medio antes y después de retirar el tapón de cerumen.
Si presentase otitis que no se haya podido detectar porque el propio tapón de cerumen nos lo oculta, esta infección podría verse agravada.
En caso que usted presentase una perforación del tímpano  que no se haya podido visualizar al impedirlo el propio tapón de cerumen, es probable que se le pudiera provocar una infección del oído medio, e incluso de rotura timpánica.